Tocino ibérico salado

Proveniente de la piel y capas de grasa del cerdo ibérico, recortadas en hojas rectangulares de diverso espesor (siendo el más grueso, proveniente de cerdos sacrificados después de la montanera, el más valorado). Después de una fase de secado, se procede a la salazón, utilizando tan solo sal gorda. Te gustan las filloas? Sin tocino, no hay!

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